«Dostoievski en la hierba» me llega, no pretendo yo engañar a nadie, a través de su autora, Mar Aísa Poderoso, sin papel de regalo pero con una bonita dedicatoria. Una novela bien encuadernada con acierto en portada y título, no digáis que «Dostoievski en la hierba» no es un gran título. Empieza bien mi experiencia lectora. Y en apenas 20 páginas queda resuelto el enigmático título… Un cadáver y una enigmática frase de Dostoievski en la hierba.
“Solo en las viviendas de estas perversas y viejas viudas puede verse una limpieza semejante.”Y a partir de ese momento, lectores, comienza el espectáculo. Ya tenemos el muerto, nos falta Diego, el policía quien junto a una curiosa Virumbrales, curioso es el personaje, no es que ella sea cotilla, tiene que llegar al asesino.
Diego Cárdenas, inspector divorciado que no acaba de aceptar la separación y Lucía, su hermana dolida, traumatizada, casi acabada, ponen la parte humana de esta historia. Porque si bien Diego nos va guiando a través del caso, Lucía, que ayuda en las traducciones necesarias se involucra poco a poco en la trama ganando terreno. Y es que en este relato, quizá como en la vida, las mujeres empiezan en un segundo plano pero acaban llenando el escenario, Logroño, y acaparando la atención de quien las mira.
Mujeres buenas y malas, débiles y fuertes, todas ellas luchadoras a su manera que reinvidican su papel en esta historia de mafia, poder y danza.
Una violinista… Ha muerto una violinista, importante para su país, desconocida en el nuestro, así es la vida, nos dice Mar Aísa. Imprescindible para unos, nadie para otros.
Así, este relato de celos y falsos poderes nos lleva a través de Logroño, sus viñedos y algún otro escenario externo. Nos guía a través del tiempo, de las dificultades, de la vida menos favorecida. Nos entretiene con frase corta y bien hilada.
Teje bien su primera historia Aísa Poderoso, muy bien, me atrevo a decir. Y sin salir de La Rioja, que no hay que irse a Brooklyn para acabar con la vida de una bailarina, autores españoles que me leéis. Logroño es más bonito y quedan fetén sus calles en vuestras novelas negras.
Me encanta traer a esta Glorieta, diría que me emociona, a Mar. Una autora discreta que huye de aspavientos y revoluciones para presentarnos un libro rápido y sencillo desprovisto de complejos.
La novela negra, dicen las malas lenguas, tiene que tener un crimen y denuncia social, pues ahí la tenéis. Salid de esta pequeña cita en la Glorieta y leed a Mar Aísa. La novela negra en España está en boga pero no siempre tenemos la fortuna de que nos llegue lo mejor…
Amando las letras elegí las ciencias, y a partir de aquí, tú, amante de los libros, rellenas.
Da igual alta o baja, guapa o fea, de ciencias o letras… Lo único importante es que leo, leo y leo.
Y me encanta que leas junto a mí.